También se plantaron afuera del ayuntamiento
Por Fernando Barrientos
Poza Rica, Ver., 4 de diciembre.-Inconformes por los cambios realizados en los sitios de ascenso y descenso, un grupo de taxistas se manifestaron frente al palacio municipal y en la Delegación de Tránsito del Estado de esta ciudad, a cargo de Jesús Ortigoza Pérez, pues aseguran que los cambios en la circulación vial les afectan, porque tienen que dar una vuelta por la calle José de J. Núñez y luego hacia la avenida Mariano Arista y 16, para integrarse al bulevar lo que provoca que gaste más gasolina y que el pasaje prefiero agarrar los taxis piratas porque pierden hasta 20 minutos de tiempo en dar esa vuelta.
Los trabajadores del volante que cubren la ruta a la Parcela 14, exigieron una solución en el ayuntamiento fueron atendidos por el contralor, José Manuel Lugo Dauzon, quién se trasladó junto con los manifestantes a las oficinas de la delegación de Tránsito del Estado para pedirle al delegado, Jesús Ortigoza Pérez, que atendiera a los taxistas inconformes quienes manifestaron que tomarán otras medidas para exigir que se haga un estudio de vialidad, antes de cambiar la circulación de las calles.
Los ruleteros señalaron que antes de llevar a cabo los cambios en la circulación de las calles del centro de la ciudad, debió haber dialogado con las diferentes organizaciones de taxistas, pero dijeron que en ningún momento el delegado Jesús Ortigoza Pérez, dio la cara para informarles sobre las acciones que realizarían, manifestando que son alrededor de setenta taxistas afectados en esa ruta, por lo que piden que permanezca la salida de los taxis de kilómetro 47, sobre la calle 14 de diciembre frente al “Rey del Cacahuate”.
Aseguran que en ese sitio no causan ninguna afectación en la vialidad y las autoridades de Tránsito del Estado, no están haciendo un estudio de factibilidad en la vialidad, por eso está causando problemas en la circulación en el centro de la ciudad y ellos se ven afectados, la ciudadanía también se quejó ya que por los cambios viales son obligados a caminar y los conductores particulares son objetos de infracciones, lejos de recibir información sobre los cambios de circulación.